Kässbohrer Geländefahrzeug AG presenta por primera vez en la Interschutz un nuevo vehículo de oruga para uso en terrenos difíciles. El PowerBully 9C permite transportar personas y equipos a lugares de difícil acceso. Como plataformas móviles para una amplia gama de superestructuras, los vehículos todoterreno con una carga útil de 9 toneladas se utilizan en el control de catástrofes, la construcción de líneas eléctricas o en la industria de la construcción.
Accionamiento potente, gran capacidad todoterreno
El PowerBully 9C está equipado con un motor Cummins de 6 cilindros con 235 CV y una tracción hidrostática. La tracción trasera proporciona una gran tracción y una inclinación de hasta el 60%, así como una velocidad máxima de desplazamiento de 14,5 km/h.
Las orugas de goma sin fin de 750 mm de ancho proporcionan una amplia superficie de contacto. El resultado es una baja presión sobre el suelo, que con sólo 0,19 kg/cm² es mucho menor que la de los vehículos de ruedas. Esto permite conducir sobre suelos con poca capacidad de carga. Con su profundidad de vadeo de 1,10 m, el PowerBully 9C puede atravesar fácilmente zonas pantanosas o inundadas.
Varias superestructuras
El PowerBully 9C cuenta con interfaces mecánicas, hidráulicas y eléctricas estandarizadas. Éstas facilitan el acoplamiento de una amplia variedad de implementos, como grúas, plataformas de elevación o elevadores de gancho.
Seguridad y confort
La cabina está certificada ROPS/FOPS y, junto con el amplio campo de visión, garantiza la seguridad durante el funcionamiento. La cabina suspendida y la disposición ergonómica de los mandos garantizan la comodidad del operador y un funcionamiento sin fatiga.
Todos los modelos PowerBully son los únicos vehículos todoterreno de oruga equipados con telemetría. Esto permite el diagnóstico a distancia en caso de servicio y, por tanto, garantiza que los vehículos estén rápidamente listos para volver a utilizarse.
Uso en el control de catástrofes
En la Interschutz, Kässbohrer presenta por primera vez el PowerBully 9C como solución para su uso en la protección civil y la gestión de catástrofes. El creciente número de catástrofes naturales supone un reto cada vez mayor para las fuerzas de rescate: la falta de vías de acceso y las infraestructuras destruidas hacen a menudo casi imposible llevar el equipo necesario al lugar de los hechos.
En la feria líder para cuerpos de bomberos, servicios de rescate y protección civil, Kässbohrer, junto con sus socios Bredenoord y Netzsch, presenta una solución operativa: Una superestructura especial, que consta de un volquete, un generador de energía y una bomba de lóbulos rotativos. La superestructura es un ejemplo de cómo los equipos necesarios en caso de catástrofe pueden llegar al lugar del siniestro de forma fiable utilizando un vehículo con gran capacidad todoterreno. La exposición puede verse en el recinto ferial de Hannover hasta el 25 de junio de 2022.
