Por Jason Nicholls, meteorólogo senior de AccuWeather®

El inusual evento triple de “La Niña” está menguando con una débil huella sobre el Pacífico central en lo que refiere a las temperaturas de la superficie marina previstas para marzo. La atmósfera sigue rezagada con respecto a los cambios de las temperaturas de la superficie del mar en el Pacífico ecuatorial, por lo que esperamos un patrón atmosférico similar a “La Niña” a principios de la primavera, seguido de condiciones neutrales del ENSO a partir de mediados de la primavera. “El Niño” podría desarrollarse hacia finales de este año.
He aquí una mirada al pronóstico de temperaturas de la superficie marina
previstas:

Courtesy APEC Climate Center and WMO

IMME and NMME

Antes de examinar el pronóstico, he aquí lo que muestran nuestros años analógicos:


Ahora una mirada a las regiones más específicamente:


Argentina, Uruguay y Paraguay:

El norte de Argentina, así como Uruguay y Paraguay en su totalidad seguirán teniendo problemas de calor y sequía entre principios y mediados del otoño; las perspectivas de lluvia pueden mejorar a finales de la temporada, ya que la atmósfera con características propias de “La Niña” finalmente disminuye en respuesta a las anomalías cambiantes de la TSM en el Pacífico ecuatorial. Una baja más rápida de “La Niña” podría significar mejores perspectivas de lluvia en abril. Para la zona central de Argentina se prevé un patrón de tiempo más seco de lo normal en marzo, con algunos episodios de calor, pero alcanzando un patrón más estacional en abril y mayo. La sequía podrá seguir siendo un inconveniente en abril con niveles de precipitación más apropiados recién en mayo. El sur de Argentina tendrá temperaturas cercanas a ligeramente por debajo de las medias históricas con precipitaciones en su mayoría cercanas a las medias históricas. Existe un bajo riesgo de heladas tempranas en estas zonas con una mayor probabilidad de heladas tardías; existe el riesgo de nevadas tempranas en el extremo sur de Argentina.

Brasil:

El calor seguirá siendo una preocupación en las zonas de cultivo de Río Grande do Sul en lo que resta de marzo y quizás en abril, donde el calor y la sequía ya han sido un problema durante el verano. Las condiciones de sequía continuarán presentes en la zona también a principios de la temporada, pero las perspectivas de lluvia podrán ir mejorando a medida que disminuyan las condiciones atmosféricas de “La Niña”. La sequía también puede ser motivo de preocupación en algunas zonas de Santa Catarina a principios de este otoño con riesgo de temperaturas altas y precipitaciones cercanas a por debajo de las medias históricas hacia finales del otoño. El resto de Brasil tendrá precipitaciones al menos cercanas a los promedios históricos de la época, aunque la cuenca del Amazonas y el nordeste de Brasil se ubicarán por encima de los promedios históricos. Parece poco probable que se produzcan heladas tempranas en el sur de Brasil. Las temperaturas a través del centro y norte de Brasil se ubicarán cercanas a ligeramente por encima de sus promedios históricos, aunque en el extremo norcentral del país lo harán por debajo de sus promedios. Hacia el noroeste y el norte central de Brasil el otoño comenzará con una nota seca, pero se prevé que retorne a niveles más normales hacia el final de la temporada a medida que las temperaturas de la superficie marina frente a Ecuador irán gradualmente en aumento a medida que “La Niña” se disipa.

Chile:

En gran parte del centro y norte de Chile, incluidas las zonas propensas a incendios forestales, estará más cálido y seco de lo usual para la época; se prevén olas de calor al menos hasta abril. Esto resultará en un acrecentamiento de la sequía y una alta amenaza de incendios forestales en estas zonas durante gran parte de la estación. El aumento de las temperaturas de la superficie del mar frente al norte de Chile dará lugar a la posibilidad de precipitaciones a finales de la temporada. En el sur de Chile las temperaturas se aproximarán a su promedio en el largo plazo, con probabilidad de algunas olas de frío a mediados y finales del otoño. Las precipitaciones se situarán cerca a por encima de las medias históricas en la zona, con posibilidad de nevadas tempranas, especialmente en el sur de los Andes.

Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia:

En estas zonas estará bastante seco al inicio del otoño con precipitaciones cercanas a por encima de los promedios en el largo plazo durante mediados y finales de la estación. Un aumento más rápido de las temperaturas de la superficie del mar frente a las costas de Ecuador y Perú podría contribuir a un inicio más acelerado de la estación húmeda. Sin embargo, se espera que el norte y el este de Colombia promedien más secos que las medias históricas. Las temperaturas promediarán cerca a por encima de sus valores normales de la época, aunque el clima más cálido respecto a los promedios ocurrirá a principios de la estación.

Venezuela a la Guyana Francesa:

En esta zona a comienzos de la estación estará bastante fresco; las temperaturas se ubicarán por encima de las medias históricas en abril y mayo. Existe la posibilidad de que el clima resulte más cálido de lo previsto, especialmente con un retorno más rápido del calor. La tendencia del ENOS, de neutra a ligeramente positiva (“El Niño”), resultará en precipitaciones por debajo de los promedios a largo plazo. Sin embargo, la Guayana Francesa y Surinam llegarán al final del otoño con una nota más húmeda.